Introducción
En esta nueva práctica seguiremos trabajando con la empresa analizada en la primera práctica. Nuestro objetivo será diseñar un modelo de cultura organizacional ideal de la empresa. Los conocimientos adquiridos, en la teoría de la asignatura, nos han hecho ver que nuestra organización actual no es perfecta, sino que necesita ciertos cambios. Por eso, propondremos una cultura de empresa ideal y la compararemos con la nuestra.
Características de la cultura de la organización:
1. Innovación y asunción de riesgos
En una cultura ideal se tiene que promover la innovación en la mentalidad de los empleados. Dejar que por ellos mismos piensen en mejoras tanto para la empresa como para su puesto de trabajo. Las reglas que deben seguir los empleados son mínimas, al igual que la supervisión de sus superiores. Así pues, el encargado estimula y premia las nuevas ideas, resta importancia al riesgo para darle un mayor papel a la innovación y no presionar ni descartar ideas por el riesgo que pueda conllevar esa idea. Esto propicia que los empleados no caigan en una monotonía que puede llegar a perjudicar a la empresa. La empresa gracias a esto opta a competir en el mercado y estar a la vanguardia en su sector, hecho que produce notoriedad de marca y respuesta rápida a las necesidades de los clientes.
Comparando la cultura ideal con la de nuestra empresa vemos que tiene ciertas diferencias que podrían mejorarse. A los empleados se les deja innovar pero siempre consultando sus ideas de innovación con sus superiores para que sea aprobada. Las reglas que rigen a los empleados son relativamente flexibles, y su acato es siempre orientativo ya que se confía en la buena voluntad de sus actos, aun así, si se ha realizado alguna acción que no sea conforme a las normas, esta debe ser notificada al superior para que vea que no hay nada fuera de lo normal. La supervisión por parte de los superiores es bastante baja al no requerirse en gran parte de los procesos, solamente es necesaria cuando se proponen cambios que deben ser monitorizados o cuando hay algún problema y hay que averiguar qué es lo que está causándolo.
2. Atención al detalle
Los empleados deberían ser escrupulosos. En el ámbito de las descargas, las ventas se hacen a través de la pantalla del ordenador, por internet. Por ello, los empleados deben cuidar hasta el mínimo detalle, los colores y formatos de la web y las descripciones, la presentación, la ortografía, la selección de imágenes, escoger las mejores escenas en posibles tráileres. Hacer todo lo posible para llamar la atención del cliente, que todo lo que el cliente vea, le agrade.
En nuestra empresa existen diferentes grados de atención al detalle dependiendo del empleado en cuestión. Los empleados de merchandising, debido a que trabajan en parte desde fuera de la empresa, a veces no son lo detallistas que deberían serlo al ser más difíciles de controlar por los superiores. El resto de departamentos estudiados en la práctica 1 –Premium, subidas y IDi- tienen un grado de escrupulosidad y detallismo bastante altos, gracias al buen ejemplo que les da el jefe de producción, un hombre muy detallista y perfeccionista.
3. Orientación a los resultados
Lo ideal es tener constancia de todo el proceso y que no se incumplen leyes ni se vulneran patentes ajenas. Reflejar todo el esfuerzo que los empleados han empeñado para llegar al resultado, y no fijarse únicamente en el resultado o en una parte del proceso. Cada segundo que el empleado dedica al trabajo es esfuerzo que se debe considerar y tener en cuenta, evitando así que parezcan despreciables las ideas no llevadas a cabo o el proceso intermedio.
En nuestro caso lo único que realmente le importa al cliente es que el contenido que quiere descargar se descargue rápido y sin problemas, sin importarle el medio o trabajo realizado para que eso sea así, y es por ese motivo que debe hacerse especial hincapié en premiar el trabajo fijándose también en los procesos internos o las buenas ideas que se hayan tenido que abandonar.
4. Orientación hacia las personas
En nuestro caso ideal de empresa, tener en cuenta los efectos y las reacciones producidas por las decisiones tomadas, en los trabajadores, es un factor importante. Si queremos ofrecer un buen producto a los clientes, necesitamos que nuestros trabajadores se encuentren cómodos con lo que hacen. De esta forma, su trabajo puede llegar a ser más eficiente y las relaciones personales en el trabajo mucho más distendidas y cordiales.
En todo momento, los directivos de la empresa, han de vigilar en las decisiones tomadas. Está claro que el resultado que se busca obtener es el máximo beneficio posible, pero dejando siempre bien claro, que nuestros trabajadores son lo más importante en la empresa, y por lo tanto, nos importa su bienestar. Si una decisión va a afectar a un grupo de empleados, esta debe ser consensuada y debatida por más miembros de la empresa, teniendo en cuenta los distintos puntos de vista y opiniones, para llegar a la mejor solución posible.
En una empresa con una cultura organizacional ideal, hay que tener claro que es mejor ganar menos dinero pero tener a los trabajadores motivados y contentos con su aportación a la empresa y que sientan que se les tiene en cuenta en el mayor número de decisiones que se tomen.
Como ejemplo podríamos poner el caso siguiente. Los empleados que se encargan de mantener en línea los contenidos de una sección de productos concreta (películas, por ejemplo) notan una notable caída del consumo en esa sección. Los directivos, al estudiar la situación concreta y ver que el negocio de ciertas películas no es viable, han de sentarse a hablar con dichos empleados y encontrar una solución. En ningún caso se cerrará esa vía de productos, ya que incluiría despidos innecesarios. La resolución correcta del problema será encontrar una nueva manera de promocionar y vender esos productos con la aprobación de los expertos y que mantenga en plantilla a los empleados afectados.
En nuestro caso, las decisiones no siempre se toman teniendo en cuenta la opinión de los empleados ya sea por la dificultad de llegar a todos ellos de forma efectiva y rápida, por ejemplo, tener una sección en la empresa que hace perder muchos recursos a la empresa, será cerrada sin previo aviso, pudiendo repercutir gravemente en los empleados, al ver destruido su trabajo. Aun así, siempre que se puede, para hacer cambios, ya sean menores o mayores, se espera siempre a la próxima reunión para poder debatirlos y tomar las decisiones de forma conjunta y controlada.
5. Orientación al equipo
Es importante destinar un grupo de personas a cada tarea de la empresa, salvo altos cargos de dirección. Teniendo en cuenta el trabajo que se realiza en nuestra empresa es muy beneficioso trabajar en equipo en todos los departamentos, para generar sinergias muy favorables en cualquier organización, y más en las que es importante innovar y desarrollar nuevas tecnologías. Al no estar de cara al público en ningún momento, y sabiendo lo importante que es el feedback, en nuestra empresa ideal es fundamental que los clientes puedan dirigirse a la empresa para mejorar o cambiar cualquier cosa que moleste al cliente, y en este punto creemos que es importante que los mensajes de los clientes sean revisados en grupo para que ninguno se tome menos en cuenta que otros por meros criterios personales del que los leería individualmente en la empresa.
Dejar todas las decisiones de la empresa a equipos de personas, permite tener más confianza en su actuación ya que a mayor número de personas, la idea que se lleve a cabo suele estar más consensuada y elaborada. Por lo tanto, las decisiones son más efectivas, tanto para el cliente como para la empresa.
En nuestra empresa real, los trabajadores gozan de una excelente coordinación dentro de los departamentos ya que entre ellos se distribuyen las tareas para que se realicen de una forma más eficiente, por ejemplo, un empleado de subidas puede dedicarse a buscar los documentos de copyright de un grupo de películas mientras otro se dedica a redactar las descripciones de estas y mientras otro se dedica a buscar las mejores capturas de la película para ponerlas en la ficha de la película.
6. Energía
Para nuestra empresa necesitamos gente con ganas de trabajar, con energía para hacer cosas nuevas y mejorar las tareas actuales. Sabiendo que la empresa es relativamente novedosa comparada con las ofertas que hay en el mercado actualmente, necesitamos constantes mejoras y mucha adaptación a lo que pide la sociedad en cada momento.
Por eso nuestros trabajadores han de ser valientes, conocedores de la situación actual y pretender innovar en cada área de la empresa. Si contratamos gente calmada, pausada, donde solo trabajan para ganar dinero sin importar lo que hacen, la empresa llegará a estancarse en algún momento y los beneficios comenzarían a disminuir.
Por lo tanto, la gente debe ser enérgica, estar en constante movimiento y pensando nuevas ideas. Esta es la ideal para el tipo de empresa que llevamos nosotros.
En nuestro caso de empresa real, los empleados son muy enérgicos, y esto en gran medida ocurre porque los mismos empleados de la empresa, luego, utilizan los servicios de la empresa y eso les da muchas ganas de seguir haciendo bien su trabajo e intentando siempre ser los primeros en ofrecer los contenidos nuevos.
7. Estabilidad
En una empresa ideal creemos que lo mejor es expandirse progresivamente para que cada vez más gente pueda disfrutar de nuestros productos o servicios, ya que creemos que nuestro servicio es mejor que el de la competencia.
En nuestro caso, tenemos ciertos límites de expansión a causa de los derechos de copyright, que se rigen por países, lo que nos obliga a concentrar gran parte de nuestros esfuerzos solamente para el mercado español. Aun así, si hay algún lanzamiento importante, se considera su compra de copyrights para poderlo distribuir en más países.
8. Conclusión
Como conclusión para esta práctica, podemos decir que nuestra empresa real tiene algunos puntos en los cuales la cultura organizacional puede mejorarse. Por otro lado, hay algunos puntos en los que nuestra empresa funciona bastante bien, como lo son la atención al detalle, el trabajo en equipo o la energía en los empleados.
